Colombia-Venezuela: El ratoncito Luis Alfonso Hoyos en la OEA
El representante de Colombia ante la OEA vociferó desafiante por más de tres horas en la asamblea lo que a su juicio constituye prueba irrefutable acerca de la presencia de las Farc en Venezuela
Maria Monica Castañeda | Kaos en la Red
En tono alpargatero y dicharachero, impropio en un escenario diplomático, el representante de Colombia ante la OEA, Organización de Estados americanos, LUIS ALFONSO HOYOS ARISTIZABAL, vociferó de manera desafiante por más de tres horas en la asamblea en Washington lo que a su juicio constituye prueba irrefutable acerca de la presencia de las Farc en territorio venezolano. Como resultado de la novela presentada por Hoyos, el Presidente Hugo Chávez rompió relaciones con Colombia, una decisión que perjudica enormemente a los dos países. Que las Farc tienen presencia en Venezuela es muy probable, son más de dos mil quinientos kilómetros de frontera que el gobierno de Colombia mantiene en total abandono, ocurre igual en la frontera con Ecuador, con Brasil y con Perú. Responsabilizar a estos países por la existencia de grupos irregulares es un despropósito. Las razones por las cuales existen estos grupos alzados en armas no son responsabilidad de los gobiernos vecinos, son las condiciones históricas colombianas las que los hacen posible.
Sobre el sainete montado en la OEA, llama la atención especialmente que sea el ratoncito parido por la montaña, como lo catalogó el representante venezolano Roy Chaderton, quien apele a la ética y a la moral para demostrar complicidad del gobierno venezolano con las Farc. El ratoncito posee unas cualidades histriónicas sorprendentes, las mismas que desplegó en el año 2001 para convencer a la sociedad colombiana de su inocencia en el proceso que terminó con su pérdida de investidura como congresista.
Hoyos Aristizabal, fue elegido congresista en el periodo 1994-1998 y sin ningún reparo ético, nombró como ‘asistente II’ a su novia del momento, la Señora Martha Cecilia Gómez Giraldo, en su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) en el Congreso, con un salario millonario. La mencionada señora viajó a los Estados Unidos a realizar estudios académicos que eran cubiertos con los dineros pagados por el Congreso colombiano. El Consejo de Estado, encontró responsable a Hoyos Aristizabal de “indebida destinación de dineros públicos y en consonancia con lo anterior quedó convertido en un cadáver político.
De cadáver político pasó a ser uno de los funcionarios más cercanos del presidente Álvaro Uribe Vélez. Tomó posesión de su cargo en 2002, dos días después de que el Primer Mandatario lo hiciera, en una ceremonia en la Casa de Nariño, nombrado entonces como director de la Red de Solidaridad Social —hoy conocida como la Agencia Presidencial para la Acción Social y la Cooperación Internacional, la misma que con sus subsidios caritativos garantizó la reelección de Uribe en el año 2006 y la elección de Juan Manuel Santos como nuevo presidente de Colombia para el periodo 2010-2014.
Este es el tipo de personajitos, de engendritos, de ratoncitos, incapaces de reconocer la gravedad de un conflicto que no se resuelve responsabilizando a terceros, ni montando la gran maquinaria de guerra mediante la cual se enriquecieron a costa del martirio de gran parte de la sociedad colombiana.
