[Esta declaración refleja un llamado internacional a la solidaridad y defensa de la democracia, y una crítica a cualquier acción que amenace sus principios fundamentales. Es un documento que apela al compromiso global con los valores democráticos y subraya la importancia de la participación y la transparencia en la gestión pública.]
Por Pablo Parry
12 enero, 2024
Nosotros y nosotras, los abajo firmantes, ciudadanos y ciudadanas del mundo, intelectuales, activistas en defensa de la paz y los derechos humanos, nos unimos en este llamado de solidaridad con el pueblo de la República Argentina frente a los recientes acontecimientos que amenazan los cimientos de su democracia, el respeto a los derechos fundamentales y la seguridad económica de millones de argentinos y argentinas.
La situación actual en Argentina requiere la atención y el repudio internacional. Recientemente, hemos observado con gran preocupación el ascenso de discursos y posiciones que podríamos calificar de neofascistas y atentatorios a la dignidad humana, representados en figuras como el recién asumido presidente Javier Milei, cuyas declaraciones y propuestas transgreden los valores democráticos y humanistas que deben prevalecer en toda sociedad que se precie de ser libre y justa.
Además, su gobierno ha emitido un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que, en la práctica, altera en esencia la constitución de la nación. Este acto ejecutivo, lejos de responder a una emergencia real y acotada, parece ser una maniobra para llevar a cabo cambios estructurales sin el debido proceso legislativo y sin la participación ciudadana que la ley fundamental requiere. Este decreto, por su contenido y por su forma, es una afrenta a la democracia y, en esencia, puede ser considerado un autogolpe de estado encubierto.
En nuestra defensa de la democracia, no podemos pasar por alto las críticas vertidas hacia la Ley Ómnibus. Dicha propuesta de ley, lejos de ser un mecanismo para mejorar la administración del estado y el bienestar del pueblo argentino, ha sido señalada como una herramienta para consolidar un gobierno autoritario, permitiendo la acumulación de poder en pocas manos y socavando las instituciones que garantizan el equilibrio y la división de poderes.
La democracia no sólo es el ejercicio del sufragio; es, fundamentalmente, el derecho a vivir en una sociedad donde la libertad, la igualdad y la justicia no sean meros enunciados, sino realidades palpables en la vida cotidiana de cada individuo. Es la garantía de que las minorías serán protegidas, de que la disidencia será respetada, y de que ningún grupo o individuo sufrirá opresión por sus ideas o identidad.
La historia argentina ha sido testigo y víctima de golpes de estado y de periodos de represión. Por ello, el compromiso con la memoria, la verdad y la justicia no es sólo un capítulo del pasado, sino una consigna viva que debe guiar el presente y el futuro. La defensa de la democracia argentina es, en este sentido, un deber para todos aquellos que abogamos por un mundo en donde la dignidad humana no sea pisoteada por ambiciones de poder o ideologías totalitarias.
Nos solidarizamos con aquellos y aquellas en Argentina que, en este momento, se levantan en defensa de su constitución, luchan por la preservación de sus instituciones democráticas y se oponen a cualquier forma de autoritarismo. Convocamos al llamado a la comunidad internacional para que se mantenga vigilante y activa en el respaldo a las fuerzas democráticas en Argentina, y para que se condenen todas las acciones que buscan subvertir el orden constitucional y democrático del país.
Instamos al gobierno de Javier Milei a reconsiderar la aplicación del mencionado DNU y la tramitación de la Ley Ómnibus, invitándolo a un diálogo abierto con todos los sectores de la sociedad y a un proceso legislativo transparente que refleje verdaderamente la voluntad del pueblo argentino.
Por último, reafirmamos nuestro compromiso con la democracia no como un fin en sí mismo, sino como el medio para alcanzar una sociedad más justa, equitativa y en paz. La democracia es el camino que permite la construcción individual y colectiva de un futuro en el que todos los seres humanos puedan vivir con dignidad.
Con esperanza y solidaridad, por una Argentina Democrática, Libre, Justa y Soberana
Firmas:
Evo Morales. Ex presidente de Bolivia.
Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la paz.
Ricardo Patiño. Ex Canciller del Ecuador.
Martín Almada. Premio Nobel alternativo 2002. Paraguay.
Juan Carlos Monedero. Politólogo. España.
Gabriela Rivadeneira. Ex Presidenta del parlamento Ecuatoriano.
Gerardo Pisarello, Diputado y Secretario de la Mesa del Congreso en Madrid.
Jorge Kreyness, Secretario de Relaciones políticas del Partido Comunista Argentino.
Manolo Pichardo. Ex Presidente de la Copppal. Secretario de relaciones internacionales de la Fuerza del Pueblo. Republica Dominicana
Nidia Díaz. Negociadora y firmante de acuerdos de paz en El Salvador.
Verónica Mendoza. Ex Candidata a Presidenta del Perú, por Nuevo Perú.
Héctor Béjar. Ex canciller del Perú
Fernando Buen Abad Domínguez. Sociólogo. México.
Katu Arkonada. Red de Intelectuales en Defensa de la Humanidad. Euzkadi
Daniel Jadue. Alcalde de Recolecta y Miembro de la Comisión Política del PC de Chile.
Enver León. Secretario General del Nuevo Perú.
Ricardo Gadea. Fundador del MIR Peruano. Cuñado de Ernesto Che Guevara.
Hugo Gutiérrez. Ex diputado del Partido Comunista de Chile.
Javier Alfaya. Secretario de Cultura del PCdoB. Brasil.
Tania Valentina Rodríguez. Diputada de MORENA. México.
Lois Pérez Leira. Analista Internacional. Argentina
Jorge Alemán. Psicoanalista. España .
Alejandro Navarro. Ex Senador de Chile.
Zaida Castro Delgado. Directora de la casa de Nuestra América José Martí. Venezuela
Ricardo Balladares. Asesor del bloque de diputados de la bancada del Partido Comunista de Chile.
Moisés Carrasquilla Vázquez. Coordinador General del Partido del Pueblo de Panamá.
Víctor Fraga, Cineasta. Reino Unido.
Javier Madrazo Lavín. Ex – Concejero de vivienda y asuntos sociales del gobierno vasco.
Carlos González Armada. Perito criminalista. Galiza
Raquel Torres Pacheco. Dirigente Nacional del Partido Pueblo Unido y De Nuevo Perú por el Buen Vivir, Perú.
Raimond Charlotte. Dirigente de Derechos Humanos de la Guyana Francesa.
Isabel Soto. Obstetra hija del líder de la Patagonia rebelde Antonio Soto Canalejo. Chile
José Pacheco. Secretario general de Pueblo Unido. Integrante de nuevo Perú.
Tirso Sáez. Ex Vice Ministro de Ernesto Che Guevara. Cuba
Mari Soto. Poeta y luchadora por los derechos humanos. Perú
Demetrio Brizuela. Analista Internacional. PSUV
Norma Guevara. Ex diputada del FMLN El Salvador.
María Stelia Cáceres. Defensora de DDHH y directora fundación Celestina Pérez de Almada.
Rafael Méndez. Ex diputado del Partido de la LIberacion Republica Dominicana. Actial integrante de la Fuerza del Pueblo.
René Ortiz Muñiz. Enlace Legislativo en la Comisión de Relaciones Exteriores de la cámara de diputados. México
Michell Aslanides. Defensora de los Derechos Humanos. Francia
Víctor Fraga. Cineasta. Inglaterra
Carlos González Armadas. Representante de Xuntos. Galicia
Christiane Barckhausen Canale. Escritora. Alemania
Fátima Rallo Gutiérrez. Antropóloga, Escritora, Militante Social. Paraguay
Carlos Lenin Villa Toribio. Partido del pueblo de Panamá
Secil de León. Profesor universitario. Guatemala
Blanca Flor Bonilla. Ex diputada del Parlamento Centro Americano, grupo Parlamentario FMLN
Boris Rio Brito. Movimiento Guevarista de Bolivia.
__________
Fuente: