Trabajadores estatales paralizaron sus actividades y marcharon en principales ciudades de Colombia
Más de 600 mil trabajadores estatales suspendieron este viernes sus actividades y se movilizaron por las principales ciudades de Colombia para protestar contra las políticas y proyectos de reforma propuestos por el Gobierno.
Los funcionarios públicos colombianos fueron invitados a participar en el Paro Nacional Estatal, por convocatoria de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y las confederaciones General del Trabajo (CGT) y de Trabajadores de Colombia (CTC).
A la manifestación se sumaron estudiantes de las universidades públicas del país, quienes desde hace varias semanas mantienen actividades en contra de una enmienda al sector de la educación, que por cierto, defendió este viernes el presidente de ese país, Juan Manuel Santos.
“No aprobar esta reforma sería la peor de las noticias para la educación de Colombia”, consideró Santos quien aseguró además que la iniciativa “es un gran aporte a nuestro objetivo de Gobierno de ampliar la cobertura de la educación superior. Allí contemplamos mayores recursos para universidades e instituciones técnicas y tecnológicas de carácter público”.
Entretanto, el director de Relaciones Internacionales de la CUT, Diógenes Orjuela, destacó que la movilización en todas las ciudades fue “supremamente grande” y transcurrió sin alteraciones.
El sindicalista comentó que la jornada comenzó con mítines en sedes de entidades estatales y siguió con concentraciones y marchas hacia las principales plazas públicas de las 32 ciudades capitales.
La protesta ha estado antecedida de movilizaciones de campesinos, indígenas, estudiantes y trabajadores del sector petrolero, en un período de agitación que comenzó a mediados de este año.
Las centrales obreras la convocaron para hacer pública en las calles su posición contra las restricciones a la libertad sindical y la negociación colectiva, la vigencia de la intermediación o "tercerización" laboral y las condiciones de inseguridad en las que se realiza el ejercicio del sindicalismo, entre otras cuestiones.
Según advirtieron estas organizaciones, más de 120 mil funcionarios siguen en sus cargos como empleados provisionales, mientras que apenas 3,5 por ciento de la fuerza laboral del país, de unas 20 millones de personas, está en sindicatos.
Además, la informalidad del empleo es de más del 55 por ciento.
Las centrales también insisten en los altos índices de impunidad en las investigaciones de crímenes contra sindicalistas, que se ubica en más de 90 por ciento.
Estas organizaciones advirtieron que, en lo que va de año, 22 sindicalistas han sido asesinados, lo que confirma al país como el más peligroso del mundo para el ejercicio de esta actividad.
teleSUR-EFE- El Espectador/ao- MM/R
Participación activa de FECODE en Jornada Nacional de Protesta
La Federación Colombiana de Educadores se movilizó hoy 7 de octubre en defensa de su Régimen Especial de Salud y se vinculó a la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, convocada por la Central Unitaria de Trabajadores, y respaldada por diferentes organizaciones sindicales del país, además de los estudiantes universitarios y del Sena. El espíritu de la protesta pacífica de los educadores y de los estudiantes, y el Paro Nacional de los trabajadores del Estado es compartido: La lucha decidida por la defensa de lo público.

FECODE exige del gobierno el respeto por su Régimen Especial de Salud y ratifica que para que exista el Trabajo Decente en Colombia se hace necesario detener la privatización de la educación pública en todos sus niveles. Es la única manera de garantizarles a nuestros futuros profesionales formación de calidad, así como empleos estables, en condiciones dignas y justamente remuneradas.
La Federación Colombiana de Educadores se movilizó hoy 7 de octubre en defensa de su Régimen Especial de Salud y se vinculó a la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, convocada por la Central Unitaria de Trabajadores, y respaldada por diferentes organizaciones sindicales del país, además de los estudiantes universitarios y del Sena. El espíritu de la protesta pacífica de los educadores y de los estudiantes, y el Paro Nacional de los trabajadores del Estado es compartido: La lucha decidida por la defensa de lo público.
Con masivas protestas en Bogotá, Barranquilla, Cali y Medellín, las filiales de FECODE y los sindicatos organizados en la CUT (Sintraestatales, Sindesena, Arcun, Sintrenal, Sindess y Anthoc, entre ellos) hicieron un llamado de alerta a la sociedad colombiana, pues mientras el gobierno de Santos insiste en que respeta los derechos de los trabajadores y el derecho a la educación, al mismo tiempo, promueve en la reforma al Estado políticas como la tercerización, la cual menoscaba la estabilidad laboral, y adelanta, contra todos los argumentos que fundamentan su nocividad, la reforma a la Ley 30, que mercantiliza a la educación superior y recorta los recursos destinados a las universidades.
FECODE exige del gobierno el respeto por su Régimen Especial de Salud y ratifica que para que exista el Trabajo Decente en Colombia se hace necesario detener la privatización de la educación pública en todos sus niveles. Es la única manera de garantizarles a nuestros futuros profesionales formación de calidad, así como empleos estables, en condiciones dignas y justamente remuneradas.
Porque la educación es un derecho, no una mercancía
http://www.fecode.edu.co/
Jornada de protestas se cumplió con normalidad
Los funcionarios que participaron del paro nacional se manifestaron en los sectores céntricos de las principales ciudades del país sin que se produjeran disturbios. La foto muestra los protestantes que se concentraron en la Plaza de Bolívar, en Bogotá. Foto Archvo semana
Así lo aseguraron las principales centrales sindicales tras el cumplimiento de la jornada de protestas. Las marchas en el país reclamaban al Gobierno garantías de negociación laboral y libertad sindical.
Con normalidad se cumplió este viernes la jornada de protesta que se realizó en todo el país. Los manifestantes reclamaban más garantías de negociación laboral y libertad sindical.
Según las tres principales centrales sindicales, el 80 por ciento de los más de 600.000 funcionarios del país participaron en las marchas y manifestaciones, que en algunos lugares contaron con la participación de estudiantes de universidades públicas que se oponen al proyecto de reforma a la Ley de Educación Superior.
Las manifestaciones se concentraron en los sectores céntricos de las principales ciudades del país sin que se produjeran disturbios, pese a las advertencias del Gobierno sobre una posible injerencia de grupos guerrilleros en las manifestaciones.
"Hemos derrotado las pretensiones del Gobierno, que nos macartizó durante ocho días esta protesta", dijo el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia (CUT), Tarsicio Mora.
El líder sindical advirtió que el Gobierno debe ahora disculparse con el país y con los trabajadores por haber afirmado que la movilización "iba a estar infiltrada por la guerrilla".
"El paro fue pacífico, y eso nos alegra mucho", dijo también el presidente de la Confederación de Trabajadores de Colombia (CTC), Luis Miguel Morantes, quien encabezó las movilizaciones en Bogotá junto a Mora y a su colega de la Confederación General del Trabajo (CGT), Julio Roberto Gómez.
El viceministro de Relaciones Laborales, Javier Parga, por su parte, garantizó que en el Gobierno están "abiertas las puertas al diálogo" y, en este sentido, llamó a las centrales obreras a que aborden con el Ejecutivo las cuestiones que consideren críticas, como la intermediación laboral y las negociaciones colectivas en el sector público.
Las dos hacen parte de las cuestiones desencadenantes de esta protesta, que además fue realizada en coincidencia con el Día Mundial del Trabajo Decente, iniciativa de organizaciones sindicales internacionales.
Tanto Mora como Morantes recordaron que el Gobierno tiene pendiente desde mayo pasado la puesta en vigencia, con la firma de Santos, de un reglamento para la negociación colectiva en el sector público, y que más de 120.000 de los funcionarios siguen en condición de provisionalidad.
Son problemas que también están presentes en todo el mercado del empleo, según las centrales obreras, que lamentan que más del 55 por ciento de la fuerza laboral de 20 millones de colombianos sea informal y que la intermediación se mantenga, pese a recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y a compromisos del Gobierno.
"En Colombia, por cada trabajador de planta hay ocho contratados por cooperativas de trabajado asociado", aseguró el presidente de la CTC, para quien "la movilización es justamente para recordar que esos acuerdos están pendientes, vigentes, y es un compromiso que el Gobierno debe cumplir".
La libertad sindical y la seguridad de los sindicalistas son asuntos que preocupan nacional e internacionalmente y que están también en el trasfondo de la huelga, dijo.
Mora denunció de nuevo que este año han sido asesinados en el país 22 sindicalistas, 16 de ellos del sector educativo, lo que hace de Colombia el país más peligroso del mundo para el ejercicio de esta actividad.
http://www.semana.com/nacion/jornada-protestas-cumplio-normalidad/165415-3.aspx