Carol L. Tilley. (Foto: L. Brian Stauffer)
(NC&T) Carol L. Tilley, profesora de ciencias de la información y bibliotecología en la Universidad de Illinois, ha comprobado que los cómics son tan sofisticados como otras formas de literatura, y que los niños se benefician de leerlos al menos tanto como de leer otros tipos de libros.
Muchos adultos, incluso maestros y bibliotecarios que gustosamente añaden cómics a sus colecciones, se apresuran a desestimar la idoneidad de éstos como textos para los lectores jóvenes.
Los críticos dirían que leer cómics es una versión simplificada de lectura que no se acerca a la complejidad de los libros "reales", con sus densas columnas de palabras y la ausencia relativa de ilustraciones. Pero Tilley argumenta que leer cualquier trabajo satisfactoriamente, incluyendo los cómics, requiere de más cosas que tan sólo asimilar el texto.
Tal como señala Tilley, para que la lectura conduzca a una comprensión o conocimiento significativo, los lectores deben abordar un texto con el debido conocimiento de las convenciones culturales, lingüísticas y sociales relevantes. Y si se toma realmente en consideración cómo las ilustraciones y las palabras actúan juntas para contar una historia en un cómic, se puede plantear que los cómics son tan complejos como cualquier otro tipo de literatura.
Los críticos dirían que leer cómics es una versión simplificada de lectura que no se acerca a la complejidad de los libros "reales", con sus densas columnas de palabras y la ausencia relativa de ilustraciones. Pero Tilley argumenta que leer cualquier trabajo satisfactoriamente, incluyendo los cómics, requiere de más cosas que tan sólo asimilar el texto.
Tal como señala Tilley, para que la lectura conduzca a una comprensión o conocimiento significativo, los lectores deben abordar un texto con el debido conocimiento de las convenciones culturales, lingüísticas y sociales relevantes. Y si se toma realmente en consideración cómo las ilustraciones y las palabras actúan juntas para contar una historia en un cómic, se puede plantear que los cómics son tan complejos como cualquier otro tipo de literatura.
Tilley cree que algunas de las actitudes de subvaloración hacia los cómics como medio de comunicación pueden provenir de las connotaciones que el nombre mismo puede evocar en algunas personas. El término "novela gráfica" se usa algunas veces para darles algo de "respetabilidad". Pero bastantes artistas, incluyendo a Art Spiegelman, ganador del premio Pulitzer, odian el término. Ellos sienten que es sólo un eufemismo para los cómics.