Yesid Quiroga.
Las organizaciones sociales y sindicales realizaron el III Congreso de Salud y Seguridad Social donde hicieron un balance de la nefasta Ley 100 y acordaron una estrategia para recuperar los derechos perdidos con dicha normatividad.
Al III Congreso sobre Salud y Seguridad Social asistieron jóvenes, asociaciones de usuarios, juntas de acción comunal y sindicatos con el fin de hacerle un corte de cuentas a la Ley 100 de 1993. El resultado de ese balance es altamente negativo porque hoy no hay cobertura universal como se prometió cuando se aprobó, los servicios son deficientes y existe discriminación.
El ex presidente de la Federación Colombiana de Educadores, Witney Chávez Sánchez, comentó que si se es pos o no pos, si es enfermedad de alto costo o no, si se es joven o no, si se pertenece al plan contributivo o al régimen subsidiado existe una gama de discriminaciones que vienen atentando contra el derecho a la salud de los colombianos.
En cuanto al derecho a tener una mesada pensional, la conclusión es igual o más preocupante, sólo el 18% de quienes hoy trabajan, contarán con esta garantía en su vejez, porque el 82% o no cotiza o lo hace de manera intermitente y esto hará que nunca obtenga el número de semanas que exige la ley.
Witney Chávez Sánchez, ejecutivo de la CUT, dio a conocer las tres conclusiones que dejó este Congreso: primero, la necesidad de presentar un Proyecto de Ley que derogue y revierta la Ley 100, segundo, realizar consejos de seguridad social y salud en todas las capitales de departamentos y municipios del país y tercero, participar en las tareas de movilización que convoquen las centrales obreras y los sectores populares. El ejecutivo de la Central Unitaria de Trabajadores asimismo invitó a la marcha del próximo 10 de diciembre que junto a las que ya están programadas para el 2010 buscan defender la salud y la seguridad social como derechos fundamentales del pueblo colombiano.
El Proyecto de Ley reivindicará los derechos a salud y pensión para todos los colombianos, le fijará al Estado la obligación de garantizárselos a la población para que no sean las EPS y los Fondos de Pensiones los que se lucren con su administración y contendrá pautas de calidad para que no sean los medicamentos de bajo costo y las citas generales las que primen, pero sólo la unidad del pueblo logrará su aprobación.