


- Es un estado cuántico sin orden magnético, donde los espines de los electrones permanecen en constante fluctuación, incluso a temperaturas cercanas al cero absoluto.
- Fue propuesto por primera vez en 1973 por el físico Philip W. Anderson como una posible fase de la materia en redes magnéticas frustradas.
- No se comporta como un imán convencional. En lugar de alinearse, los espines se entrelazan cuánticamente en una especie de "desorden ordenado".
- Puede presentar excitaciones fraccionalizadas, como los espinones, y fenómenos emergentes como fotones sin luz, que simulan comportamientos electromagnéticos.
- Es extremadamente difícil de detectar. No hay patrones visibles, por lo que se necesitan técnicas avanzadas como la dispersión de neutrones polarizados.
- El nuevo estudio confirma experimentalmente un líquido de espín cuántico tridimensional, algo que nunca se había logrado con tanta claridad.
- El material clave fue Ce₂Zr₂O₇, un compuesto cristalino que mantiene su comportamiento cuántico incluso a 20 milikelvin.
- El hallazgo se publicó en la revista Nature Physics, lo que le da alta credibilidad dentro de la comunidad científica.