Los trabajadores de la British Petroleum Company
continúan en paro
continúan en paro
Yesid Quiroga.
En el norte de Bogotá frente a un imponente rascacielos se unieron los débiles que soportan los abusos de la BPC para exigirle a esta multinacional que respete la tierra, tenga en cuenta a las comunidades casanareñas y ayude a frenar la ola de asesinatos y desapariciones.
Durante 20 años la multinacional British Petroleum Company ha explotado dos yacimientos ricos en petróleo y gas: Cusiana y Cupiagua. Ecopetrol y la Nación han recibido excelentes ganancias pero de acuerdo con los lugareños, que realizaron un mitin frente a las instalaciones de la trasnacional, la población es cada vez más pobre, siente que la economía se petrolizó y encareció arriendos, alimentos y productos de primera necesidad, realidad que choca con el número de desempleados en una tierra rica, pero destinada a favorecer a tan solo unos pocos.
Para Abel Giraldo, presidente de la Subdirectiva de la USO en Bogotá, el Gobierno de César Gaviria entregó unos derechos a la Triton Energy quien posteriormente se los endosó a la British Petroleum Company, BPC, quien fue la que finalmente vino a aprovechar los estudios de sísmica y el conocimiento sobre los yacimientos que durante años había realizado la estatal petrolera ECOPETROL. A este lamentable panorama se suma el hecho de que en la región los grupos paramilitares en unión con la BPC están despojando a los pobladores de sus terrenos donde ellos necesitan hacer sus perforaciones.
En las dos décadas de extracción implacable se han secado ríos, se ha contaminado el medio ambiente por derrame de lodos y quema de gas a cielo abierto y la gente ha soportado 10.500 muertes y 2.553 desapariciones, todo por la codicia extranjera. Por todo esto los trabajadores de la BP afiliados a la USO y las comunidades casanareñas están en paro desde hace dos meses, pero sólo han recibido represión militar y laboral.
Según Isael Marín, uno de los asistentes y afectados por las políticas de la BP, inmediatamente después de que comenzó el cese de actividades la compañía le envió la carta de despido a todos los trabajadores; situación que complicó las cosas porque la comunidad continúa en paro y cada día se van sumando más trabajadores y la única respuesta que se ha recibido hasta la fecha del Gobierno Nacional y la multinacional son los escuadrones antimotines.
Mil millones de barriles de petróleo han contribuido a incrementar las arcas de la British, mientras tanto, los colombianos nacidos en Casanare, los llaneros que aman su tierra y deberían vivir de ella y los demás nacionales que por el hecho de serlo deberían tener como contraprestación, por la entrega de los recursos a una multinacional, mejor calidad de vida, sólo han recibido migajas de una gran torta y violencia, maltrato laboral y abandono por parte de quienes se llevan la gran tajada.