Soluciones para los cafeteros no represión
Luego de 8 meses de haber iniciado la solicitud al gobierno nacional, de marchas, cartas y solicitudes respetuosas para que atendiera la profunda crisis que agobia a las cerca de 600.000 familias cafeteras por la baja sostenida del precio interno que a la fecha representa pérdidas superiores a los $200.000 por carga y la reducción de la cosecha, ante la indiferencia del presidente Santos y la cúpula de la Federación Nacional de Cafeteros, nos vimos obligados a iniciar ayer un paro cívico nacional cafetero de carácter indefinido de carácter pacífico, pero que desafortunadamente arrojó hechos de violencia, que lamentamos, como consecuencia de la arremetida de la fuerza pública contra los manifestantes y sus pertenencias, es así como tenemos que registrar un número indeterminado de heridos en los diversos puntos de concentración en Garzón, Pitalito y Neiva, varios de ellos de gravedad; la destrucción de un vehículo de propiedad de un labriego de Santa María y varias motos por parte del ESMAD; así mismo se encuentran varios detenidos entre ellos ABELARDO CUCHIMBA del municipio de La Plata, para quienes exigimos trato humanitario y libertad inmediata.
La respuesta nuevamente frente al justo reclamo ha sido la represión violenta, la descalificación y el señalamiento como terroristas y un sin número de mentiras sobre supuestos apoyos millonarios a los caficultores, otra vez el gobierno presenta como solución un mayor endeudamiento que acrecentaría las dificultades del gremio y una “constituyente” que diagnostique las razones de los problemas ya conocidos: libre comercio, revaluación, ausencia de investigación y transferencia de tecnología, especulación, altísimo costo de los insumos; más dilación frente a las dificultades y nada de soluciones reales: precio de sustentación, baja en los precios de fertilizantes, arreglo de las deudas, cierre de importaciones de productos agropecuarios que producimos y limitaciones a las licencias de explotación minera y petrolera en zonas de reserva y producción agrícola.
No queda alternativa diferente a continuar en la protesta exigiendo el respeto a los agricultores para que pueda hacerse de manera pacífica e invitar a los diferentes sectores de la sociedad civil para que mantengan la solidaridad que han expresado con los cafeteros, gente trabajadora y de bien que han contribuido de manera significativa a la construcción de Colombia.
MOVIMIENTO POR LA DIGNIDAD Y LA DEFENZA DE LA CAFICULTURA
Multitudinaria protesta cafetera y cacaotera
Enfático rechazo a la represión ordenada por Santos. El gobierno debe atender justos reclamos de cafeteros y cacaoteros. Es un farsante quien afirme que agricultores no tienen razones para protestar.
El primer día del paro de cafeteros y cacaoteros demostró que la movilización de los agricultores es enorme. En 11 departamentos más de 70 mil campesinos, jornaleros, empresarios e indígenas se concentraron y marcharon por las principales carreteras del país para exigirle al gobierno soluciones de fondo a la grave crisis por la que atraviesan, lo que demuestra la fuerza del paro.
A pesar de la actitud civilista de los manifestantes, el presidente Santos dio orden de reprimir con ferocidad las protestas de los agricultores. Los ataques dejaron varios heridos, entre ellos, un campesino de Santander que perdió una de sus manos. El senador Robledo rechazó de manera enfática la feroz represión de Santos y le exigió garantías para el ejercicio del derecho a la protesta.
Robledo afirmó que Santos, el ministro Juan Camilo Restrepo y el gerente de la Federación, Luis Genaro Muñoz, actúan como farsantes no reconocer que el paro es de los cafeteros, organizado por los cafeteros y para defender a los cafeteros.
El congresista reiteró que el Polo, en cabeza de su presidente Clara López, respalda el paro y señaló que su partido no se dejará amedrentar por la estigmatización del gobierno.
Más de 70 mil caficultores y cacaoteros salieron este lunes 25 de febrero a las carreteras de Colombia a reclamar solución a las justas reclamaciones que desde hace un año le han formulado al Gobierno Nacional. Toda Colombia conoce que los precios de la carga de café y cacao han caído estrepitosamente y que la situación de empresarios, campesinos, comerciantes y transportadores de esas zonas de cultivo, es ruinosa.
El Polo Democrático Alternativo rechaza la brutalidad y el uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía Nacional. ¡Es inadmisible el tratamiento represivo ordenado por el gobierno del presidente Juan Manuel Santos contra una protesta ciudadana adelantada dentro del marco de la Constitución! A esta hora hay más de 30 personas heridas, algunos con mutilaciones de sus extremidades y otros de diagnostico reservado por el uso de granadas de aturdimiento, gases lacrimógenos, entre otros, por parte de la Policía Nacional. También se tiene conocimiento de la detención de varios manifestantes.
El Polo Democrático Alternativo hace un llamado al gobierno para que respete la protesta y entre a solucionar los graves problemas que afectan a este simbólico renglón de nuestra economía, a los demócratas y las organizaciones sociales a rodear de apoyo y solidaridad a nuestros campesinos.
Clara López Obregón
Presidenta
Gustavo Triana Suárez
Secretario General
Congresistas piden soluciones al Paro Cafetero
Oficina de Prensa Senador Jorge Enrique Robledo
En una declaración conjunta, los congresistas Juan Carlos Vélez, Liliana Rendón, Jaime Alonso Zuluaga, Jaime Durán Barrera, Manuel Enríquez Rosero, Jorge Enrique Robledo, Mauricio Ospina y Alba Luz Pinilla le hicieron un llamado al presidente Santos para que atienda las peticiones que generaron el Paro Nacional Cafetero.
Los congresistas señalaron que la crisis del café es evidente, pues el precio del grano ha caído en un 40 por ciento, “con la consecuente incapacidad de los caficultores para atender sus deudas bancarias y de todo tipo”. Por esta razón hicieron un llamado al gobierno a que “tome las determinaciones necesarias –sobre precio, deudas, costos de producción y demás- para atender los muy justos reclamos de los cafeteros”.
Se anexa el texto de la declaración:
CONGRESISTAS SOBRE EL PARO NACIONAL CAFETERO
Es conocida la preocupación de distintos congresistas por la prolongada y grave crisis en la que se debaten los cafeteros colombianos, crisis que se demuestra y se expresa en toda su gravedad en el Paro Nacional Cafetero que se inició en el día de hoy.
Del café viven en Colombia 560 mil familias de propietarios de cafetales y al menos otro tanto de obreros agrícolas. Y el café también es determinante en la economía de los comerciantes, transportadores y demás ciudadanos de 600 municipios del país. Constituiría un desastre de proporciones inimaginables que este problema se agravara hasta la ruina definitiva de un sector que en muy buena medida le da estabilidad de todo tipo al país.
En la crisis juega un papel fundamental la gran disminución de la producción en los últimos cuatro años y, en especial, que el precio interno del café haya disminuido el 40 por ciento en los últimos doce meses, con la consecuente incapacidad de los caficultores para atender sus deudas bancarias y de todo tipo. Con precios del café como los actuales no es posible que el negocio dé para pagar los altos costos de producción y sostenerse en el tiempo, aún si se recupera el volumen de la cosecha.
En estas circunstancias, los congresistas que respaldamos esta declaración, miembros de diferentes partidos políticos, llamamos al gobierno del presidente Juan Manuel Santos a que tome las determinaciones necesarias –sobre precio, deudas, costos de producción y demás- para atender los muy justos reclamos de los cafeteros.
Senadores:
Juan Carlos Vélez, Liliana rendón, Jaime Alonso Zuluaga, Jaime Durán Barrera, Manuel Enríquez Rosero, Jorge Enrique Robledo, Mauricio Ospina
Representante:
Alba Luz Pinilla
Brutal agresión al Paro Nacional Cafetero en el Tolima
"Si no hay café para todos, no habrá para nadie" (Che)
|Por Nelsón Lombana Silva|
Con extrema brutalidad la fuerza pública y el Esmad agredieron la multitudinaria y pacífica manifestación de protesta que viene desarrollando el campesino cafetero en trece departamentos de Colombia. La brutalidad por parte de los esbirros del régimen, demuestra una vez más que éstos están exclusivamente para defender los intereses de clase de la burguesía altamente transnacionalizada y para reprimir cobardemente al pueblo humilde e indefenso.
En el Tolima, fueron agredidas las protestas ubicadas en Boquerón, Ibagué y Armero – Guayabal, al norte del departamento. En el caso de Ibagué, fue infame, cobarde, artera y criminal. Se encuentran allí, cerca de cinco mil labriegos pacíficamente esperando del gobierno nacional una solución justa a sus nobles solicitudes y la respuesta desalmada del gobierno es enviar una multitud de robot humanos a agredir tal como lo hicieron.
Mientras una inmensa mayoría almorzaba en los restaurantes aledaños, otros reposaban apaciblemente, medio adormilados incluso, algunos jugaban una partida de ajedrez y otros caminaban por la vera de la avenida sin obstaculizar para nada la vía panamericana, de un momento a otro comenzaron a disparar bombas de aturdimiento y lacrimógenas a diestra y siniestra.
Yo iba caminando con los campesinos. Iban en absoluto silencio. Les dije: Gritemos unas consignas. No estamos en un velorio” y grité en tres oportunidades: “Viva el paro de los campesinos caficultores. Viva la unidad campesina y popular. Viva la paz con justicia social”. No pude gritar más. Los disparos comenzaron. La gente retrocedió. Alguien joven pasó a toda carrera. Yo giré para retroceder pero no pude porque también estaban disparando. Saqué la camarita e intenté tomar imágenes. Poco pude aguantar. Salté a un caño por donde varios campesinos habían saltado y allí intenté tomar otras imágenes. Pero, en ese momento el carro de mi seguridad entró y con la ayuda del otro compañero escolta pude abordar el carro y salir para recibir los primeros auxilios de los compañeros.
Varios periodistas fueron igualmente agredidos incluso, el Defensor Regional del Pueblo y su equipo de trabajo. El gas entró hasta la cocina del restaurante “Don Matías” afectando a las mujeres que vendían el almuerzo en el ese momentos a centenares de campesinos. Miguel Gómez, periodista de la FM fue tirado al piso violentamente, también Germán Acosta de RCN radio, Milton Henao de Telesur, lo mismo su camarógrafo y por supuesto, nosotros del semanario VOZ La verdad del pueblo y la página web: www.pacocol.org. Seis campesinos fueron heridos de gravedad y remitidos al hospital regional Federico Lleras Acosta y otros centros asistenciales.
Una vez vino la tensa calma, el líder Edgar Sánchez Cortés, megáfono en mano, fue reorganizando a los campesinos con el ánimo de evitar la dispersión. Se nombró una comisión para hablar con el gobernador Luis Carlos Delgado Peñón, la cual estuvo compuesta por delegados de los distintos municipios presentes en la protesta. El gobernador no resolvió nada. Se limitó a dividir la comisión y enviar una parte a hablar con el comandante de policía y la otra con el alcalde municipal, Luis H. Rodríguez, uno de los alcaldes más ineptos que ha tenido la ciudad musical de Colombia en los últimos años.
La comunidad rechazó la postura del gobernador y de las demás autoridades con la cual interactuó dicha comisión, tomando la decisión soberana de radicalizar el paro y marchar mañana a partir de la siete de la mañana hacia Cuello. Es decir, hacia el municipio de Cajamarca, Tolima.
Testimonios
Periodista Miguel Gómez: “Yo estaba haciendo una entrevista en ese momento, me golpearon violentamente, caí y me dispararon, teniendo que tirarme al rastrojo, pero allí también me dispararon y como pude salí para refugiarme en otro sitio. Estando en el piso me entrevistó Milton Henao de Telesur. Él tiene esas imágenes”.
Un funcionario de la Defensoría del Pueblo, dijo: “Nosotros estábamos cerca al Esmad y justamente el defensor regional del pueblo, doctor Miguel Ángel Aguiar Delgadillo, intentaba convencer al comandante para que no actuara por cuanto todo estaba en paz, tranquilidad y armonía, pero no fue escuchado, inmediatamente da la orden y nos agreden a nosotros también”.
Luis Eduardo Bonilla, campesino del municipio de Rovira, indicó: “Vinimos desde por la mañana al paro y la policía nos recibió con gases y todo. A mí me dispararon con esa vaina de disparar y me pegaron en un brazo. La disculpa que ellos dicen es que notros les estábamos tirando piedra, pero eso es totalmente falso. Solamente íbamos caminando y comenzaron a disparar esos gases. Quiero pedirle al gobierno nacional que nos apoye en vez de estar tirándonos bombas, queremos que nos mejore el precio de la carga de café, porque está muy malo. En eso es que estamos. Ahora me voy para el hospital porque estoy herido, pero la idea es seguir en la lucha. Estoy esperando una ambulancia, no llega, tengo que buscar otros medios para ir al hospital.
También recogimos la experiencia del periodista de Telesur, Milton Henao, en el mismo teatro de los acontecimientos, que los presentaremos en entrevista amplia donde fija su posición como comunicador social, pero también como parte activa de la clase social y popular. Es una entrevista lograda en la línea de fuego de un régimen que solo tiene como respuesta a la demanda del pueblo la caústica represión, el terrorismo de Estado.
PaCoCol