"Qué dijimos en la creación del Polo Democrático Alternativo: cero a la lucha armada, cero al secuestro, cero a la extorsión, cero al homicidio, al atentado, al acto terrorista, nada que tenga que ver con esto. Pero también dijimos: solución política del conflicto armado". Robledo

Estimados compañeros Valter Pomar y todos los demás líderes de partidos de izquierda de la América Latina y de la República Popular China, reciban mi saludo cariñoso y el deseo porque su estadía en Colombia sea la mejor. También saludo a nuestro queridísimo portaestandarte de todas estas luchas, que es seguro seguirá siéndolo, compañero Carlos Gaviria. Portaestandarte por dos ideas, que no deben perderse en este Congreso de tanta importancia. La primera, que él siempre planteó: este es un Partido que debe funcionar sin sectarismos, pero sin ambigüedades, como él lo ha practicado a lo largo de su presencia en esta organización. Y resalto también que Carlos Gaviria es de esos jefes dignos de ser seguidos porque no se doblegan ni ante el ataque ni ante los halagos. Todos sabemos que si Carlos Gaviria se hubiera dejado moldear por las fuerzas reaccionarias de Colombia, probablemente otra habría sido su historia personal. Pero Carlos Gaviria es de esas personas que ni se espantan ni traicionan, y lo quiero enaltecer hoy aquí porque debe ser un modelo a seguir por todos nosotros.

Un saludo especialísimo y lleno de cariño por nuestra presidenta del Partido, la doctora Clara López Obregón, una persona que asumió con entereza y valor civil la Presidencia de este Partido en el más difícil momento de su historia. Tuvo el valor civil para asumirlo y no ceder tampoco ni ante los halagos ni ante las presiones. Ella es una persona que ha mostrado gran capacidad organizativa, que ha empujado la organización de este Partido y que tuvo un éxito indiscutible como alcaldesa de Bogotá, éxito que estoy seguro va a proyectarse hacia el futuro.

No voy a saludar a todos los miembros de la bancada del Polo Democrático Alternativo, porque no quiero alargarme, pero sí decirles, mis queridos compañeros, que es un orgullo estar luchando con ustedes en esa especie de antro que es el Congreso de la República. A todos los delegados de todas las regiones, mis saludos. Y voy a saludar con nombre propio a cinco personas, con la idea de que esas cinco personas representen a todos los luchadores de la nación colombiana. Me refiero a los compañeros Domingo Tovar, Senén Niño y Rodolfo Vecino, respectivamente, presidentes de la CUT, Fecode y la USO, hoy aquí con nosotros en este evento. Y a dos personas más. Hubo ayer otro de esos triunfos históricos de la lucha social que vienen sucediéndose en este gobierno. La empresa El Cerrejón, perteneciente a las trasnacionales BHP Billiton, Angloamerican y Xtrata, decidió retirar el trámite de la desviación del río Ranchería, y en ese triunfo histórico, en el que estuvo todo el pueblo de La Guajira y, junto a muchos dirigentes populares, destaco con cariño a dos de ellos, Jaime Deluque, uno de los jefes de Sintracarbón en ese departamento, y Felipe Rodríguez, uno de los voceros del Comité que libró la batalla, ambos distinguidos miembros de nuestro Partido, hoy presentes aquí en este Congreso.

Un Congreso histórico

Estamos, compañeros y compañeras, ante un III Congreso que será histórico, porque va a consolidar nuestra organización, va a ratificar todos sus aciertos, todo lo bueno que hemos hecho y que podemos hacer, y va a preparar las condiciones para dar un gran salto hacia adelante en los próximos meses y particularmente en la gran batalla política del año 2014.

Hoy tenemos, compañeras y compañeros, que ratificar un Partido que aprende de su historia y de sus errores para consolidarse, pero un Partido que para consolidarse tiene sobre todo que confirmar sus aciertos, aciertos que son de lejos infinitamente más grandes que los errores que hayan podido cometer dirigentes de este Partido, errores que siempre y en todos los casos se cometieron porque esas personas no siguieron los principios y las orientaciones del Polo Democrático Alternativo.

Un Partido, y es el resumen de nuestro gran sueño, de la auténtica izquierda democrática colombiana. Un Partido que se ha constituido y permanece sin pedirle permiso a ningún señorito de las fuerzas reaccionarias de Colombia, sin consultarle nuestro programa y nuestro pensamiento a nadie de los mandamases de este país. Un Partido también con un programa de una inmensa amplitud. Es difícil encontrar un proyecto programático más amplio, más unitario que este, donde puedan caber más compatriotas, un proyecto que excluye en últimas a la pequeña pandilla de los vendepatrias que destruyen a Colombia en beneficio de potencias foráneas. Un proyecto que defiende el trabajo y por supuesto a los trabajadores como primera circunstancia, con todo lo que eso implica en la amplitud de los intereses de los de abajo y de las gentes sencillas.

Un Partido que defiende con toda inteligencia y sabiduría la producción industrial y agropecuaria como uno de los fundamentos del progreso de cualquier país e incluye allí la defensa de la producción empresarial, personas con quienes podemos coincidir para avanzar en la defensa de la soberanía y el progreso de Colombia.

Un Partido que defiende la democracia, la democracia auténtica y no a ese espectáculo bochornoso que ilustra bien en los medios de comunicación algún pasaje de la picaresca de estos días, en que los dos pilares del santismo se disputan a ver quién es la amante y quién la esposa del jefe del Estado, que a cada uno de ellos el mandarín les garantiza el mercado.

Un Partido que defiende la movilización y la lucha, e insistimos, la lucha civil, la resistencia civil, pacífica y democrática, como lo hemos venido haciendo.

Y un Partido, siempre lo dejo de último para resaltarlo como principal, que defiende la soberanía nacional de Colombia como el principal valor. Un Partido que no está por aislar a Colombia del mundo, pero que se niega a hacer de Colombia un país correveidile de los intereses imperialistas. Un Partido que se niega a hacer de los colombianos la mula de la alianza con el jinete del capital extranjero y las trasnacionales.

Un Partido que siempre y en todos los casos ha estado al lado de las luchas del pueblo. Falta en materia grave a la verdad quien diga que los polistas no hemos estado siempre y en todos los casos al lado de todas las luchas del pueblo colombiano.

Un Partido democrático. Esto es de una importancia capital. Que no tiene dueños, cuyos militantes y líderes no se doblegan ante nadie ni apoyan a nadie que no abrigue la razón y que no se haya ganado su respaldo de manera democrática. Un Partido que es capaz de decir no cuantas veces sea necesario.

Un Partido, y sin esto nada de lo anterior vale la pena, que fue capaz de declararle la oposición a Álvaro Uribe Vélez y mantenerla a lo largo de ocho años. Pero más importante aún, si se quiere, porque era más difícil acertar, un Partido que se declaró y sigue siendo el único partido de oposición al gobierno de Juan Manuel Santos.

Estos son principios que creo que este III Congreso va a ratificar, como también va a ratificar la idea de trabajar por el Partido cada día más, mis queridos compañeros y compañeras. Un Partido en el que hay tendencias, puntos de vista, matices, y es natural que los haya. No hay una organización de los seres humanos donde la controversia no esté presente. Y esa controversia bien conducida es la vida de nuestro Partido.

Creo que hoy vamos a desterrar para siempre esa idea, que tanto daño ha hecho, de dirigentes de nuestra organización que tramitaron sus ambiciones personales contra el Partido y que fueron capaces de sentarse a conspirar con las fuerzas reaccionarias de Colombia en contra de Carlos Gaviria, un crimen imperdonable en nuestra historia.

Si algo debemos aprender los polistas es el propósito de tramitar nuestras diferencias siempre cuidando a nuestro Partido, el barco en el que vamos todos, y siempre con la idea de supeditar las aspiraciones de tendencia a los intereses generales del Partido. La principal obra que estamos haciendo, compañeros y compañeras, es construir una organización con vocación de poder, pero también con vocación de permanencia, que dure para siempre, que el día en que no estemos continúen con este proyecto nuestros hijos, nuestros nietos, todas las generaciones de colombianos en el empeño de sacar este país adelante.

El único Partido de oposición

Queremos un Partido que sea capaz, como lo hemos venido haciendo, de desenmascarar a Juan Manuel Santos. Es parte fundamental de nuestro trabajo. Nuestro éxito futuro depende de que el pueblo colombiano sea capaz de entender nuestro pensamiento con respecto a este último sátrapa que nos ha puesto la oligarquía colombiana en la dirección del Estado. Cómo defender a un personaje que llenó a Colombia de TLC, que lleva no sé cuántos años defendiendo las políticas del Consenso de Washington, que intentó convertir la educación en un vulgar negocio de los inversionistas extranjeros, y todavía trabaja en eso, un personaje a quien cogimos con las manos en la masa hace unas pocas semanas intentando destruir la tutela en salud, uno de los medios con que se defiende hoy el derecho a la salud de los colombianos. Un presidente que anda viendo a ver cómo golpea nuevamente las pensiones de los trabajadores, que fue capaz de presentar una reforma tributaria sin antecedentes en la historia, calculada para bajarles los impuestos a los Carlos Slim y a todas las trasnacionales en ocho billones de pesos, y en esa misma suma subírselos al pueblo raso y a las clases medias. En estas políticas económicas y sociales, ¿es posible encontrar a un personaje en Colombia más reaccionario que este?

Y en lo político ¿quién es el doctor Juan Manuel Santos? Lo que está montando es otro frente nacional. ¿Puede haber algo más reaccionario en la concepción política de un país que un jefe de Estado ponga todo su poder para comprarse uno por uno a los dirigentes políticos con el fin de montar un combo siniestro en contra del progreso de su país? Ese es Juan Manuel Santos. Ocho años de cárcel incluyeron él y Germán Vargas Lleras en un proyecto de ley a quien bloquee una vía, cuando todos sabemos que esas son formas de la lucha y la resistencia popular. Qué tal la monstruosidad que intentó hacer con la reforma a la justicia. ¿No intentó imponer su férula a los tres poderes? No creo que haya nada en la concepción del tipo de Estado más reaccionario que la de un mandarín que intenta una pretensión de ese calibre. ¿No avanza con éxito en la modificación del fuero militar, algo que ni siquiera el gobierno anterior se atrevió a proponer? Los decretos aprobados contra la minería informal son de una naturaleza fascista impresionante. ¿No está dedicado a reelegir, junto con sus amigotes, al procurador Ordóñez? ¿Vamos a caer en la bobería de pensar que el doctor Santos tiene un candidato distinto al actual procurador general de la Nación? ¿Y no está dedicado todo el tiempo a reelegirse? ¿No nos pareció que en el gobierno anterior la reelección fue de las peores cosas que un gobernante podía hacer contra la democracia nacional? Y entonces qué, ¿ahora nos vamos a acostumbrar los polistas a verla como aceptable?

La única diferencia de Santos con respecto a otros gobernantes en Colombia es que este es un histrión, es un tira la piedra y esconde la mano. Morrongo, le dicen en el Quindío, farsante, disfrazado de cosas que no son. Solapado, me dice Wilson Arias. Santos todo lo calcula para seguir en su obra de destrucción de Colombia.

Solución política del conflicto armado

¿Qué dice el Polo Democrático Alternativo frente al tema de la paz y de los procesos de paz? Un par de cosas de importancia. La primera que hay que resaltar, muy importante, que no es en estos temas donde se define la naturaleza de las personas. Cualquier persona con cualquier ideología, sea de centro, de derecha o de izquierda, o con cualquier concepción religiosa, o de cualquier nivel económico, es capaz de empuñar las armas o de promover la paz en un determinado momento, dependiendo de sus intereses particulares. No es lo que define la naturaleza de las personas el hecho de que se adelante o no un proceso de paz. Es un tema que se puede discutir, pero dejo planteado el punto de vista.

¿Cuál es la posición del Polo Democrático Alternativo sobre el proceso de paz? Exponerla es relativamente fácil porque la tenemos definida desde que nacimos. Qué dijimos en la creación del Polo Democrático Alternativo: cero a la lucha armada, cero al secuestro, cero a la extorsión, cero al homicidio, al atentado, al acto terrorista, nada que tenga que ver con esto. Pero también dijimos: solución política del conflicto armado. Y hay que ver lo que nos ha costado defender nuestra posición. Si ahora resulta entonces que el presidente Santos impulsa un proceso de paz para solucionar ese gravísimo problema de los colombianos, se confirma que Santos es de esos personajes que solo aciertan cuando rectifican, porque en el gobierno anterior afirmaba lo contrario. Pero, bueno, estamos de acuerdo con el proceso de paz, estamos por no ponerle palos a la rueda a ese proceso. Ojalá las cosas salgan bien, no porque los diálogos vayan a cambiar profundamente a Colombia, no podemos hacernos esa ilusión, sino porque el proceso de paz tiene que redundar de una manera o de otra en que haya menos fusiles en los campos, lo que les va a significar menos sufrimientos a este país y a este pueblo. Y sobre todo, y es de una importancia capital para quienes estamos luchando por transformar profundamente a este país, cualquier avance en la paz, que haya mucho menos violencia, nos debe permitir a los del Polo Democrático Alternativo levantarnos con más fuerza en la lucha por transformar a Colombia.

Que le quede claro al doctor Juan Manuel Santos que el Polo Democrático Alternativo no se va a volver santista porque haya proceso de paz. Que le quede claro al doctor Santos que el Polo seguirá acompañando las luchas de los jóvenes de la MANE, las de los sindicalistas, de los campesinos, de los trabajadores. El Polo seguirá llamando a la resistencia popular contra un régimen reaccionario. El colmo sería que termináramos nosotros de santistas.

Clara López, candidata del Polo a la Presidencia

Pienso que una de las principales conclusiones de este evento va a ser anunciarle al país que el Polo Democrático Alternativo tendrá su propia candidatura en las elecciones presidenciales del 2014, con el propósito de derrotar a Juan Manuel Santos. Pensemos, compañeros, en que estas elecciones podrían desarrollarse en situación diferente a la de hoy. El mundo no es estático, se está moviendo, y hay nubarrones de altísima complicación. Luego, el Polo tiene que ir a esas elecciones con el propósito de ganar la Presidencia de la República, aun cuando esa meta pueda parecer compleja a estas alturas del Partido. Falta mucho tiempo y mucha agua por correr debajo de los puentes.

Tenemos que preparar al Polo para esta batalla. Qué es preparar al Polo para la batalla. Primero, afinar la organización del Partido. Es mucho todavía lo que podemos avanzar en constituir organización del Partido en cada rincón de Colombia, insistiendo en la oposición a Santos, porque si el Polo no logra caracterizarse como un partido alternativo a las propuestas de Santos, no tiene ninguna posibilidad política en la batalla del 2014. Y por supuesto, acompañando las luchas del pueblo, todavía más, sin excepción, mis queridos compañeros. No puede haber lucha popular en Colombia, ni la más pequeña, ni la del ciudadano más débil en el último rincón del país, en donde los del Polo no estemos al lado de nuestros compatriotas apoyándolos, ayudándolos, haciendo todo lo que debemos para que su movilización salga adelante.

Y pienso también, compañeras y compañeros, que debemos tomar determinaciones sobre la candidatura presidencial del Polo para las elecciones del 2014. Ayer en una rueda de prensa con Clarita, Wilson y otros compañeros del Partido, un periodista me preguntó: senador Robledo, ¿a usted le gustaría ser candidato presidencial del Polo? Claro que sí me gustaría serlo, le dije. Cómo no me va a gustar. Cuánto orgullo sentiría yo de ser candidato presidencial del mejor partido político de la historia de la República de Colombia. Cómo no me va a gustar ser el portaestandarte de todos ustedes, de dirigentes como los que tenemos sentados aquí en la mesa directiva. Por supuesto que sí. Son cosas que producen satisfacciones.

Pero sobre todo cómo no le va a gustar a un polista ser el portaestandarte de esos militantes perdidos en los confines de la República, que ni sabemos cómo se llaman, a los que nunca nadie les ha arrimado un micrófono y ni nadie nunca les ha preguntado nada, que nunca han aspirado a un cargo de dirección porque no tienen la fuerza suficiente. De ese ciudadano, un hombre o una mujer del pueblo, que en las elecciones de hace unas semanas para escoger a los delegados al III Congreso del Polo, a todos nosotros, no sacó sino un voto, el de él mismo, después de atravesar solo, íngrimo, la plaza del pueblo para llegar hasta la escuela donde estaban las mesas, entrar y decir: “Aquí estoy, aquí está el Polo Democrático Alternativo”.

Pero también le agregué a quien me hizo la pregunta: “Mi querido periodista, uno en la vida no se la pasa haciendo lo que le gustaría hacer, sino que en buena parte de la vida, siendo una vida decente, se la pasa haciendo lo que cree que debe hacer en función de sus convicciones, de sus luchas, de las ideas que considera que valen la pena y aquí todos estamos defendiendo ideas que creemos que valen la pena”.

Y entonces también está la posibilidad de Clara López Obregón para que sea nuestra candidata presidencial. Ya hice alguna mención a los méritos de Clara. La suya es una aspiración que no es abusiva ni arbitraria. Ya lo dije, porque mostró valor civil en un momento muy difícil del Polo. Era muy difícil pararse firme en un momento en el que nuestros enemigos viejos y nuevos se unieron para conspirar por la destrucción de este Partido. Pararse ella, como se podrá recordar y decir: “Yo estoy aquí y me echo la carga de dirigir esta organización”. Clara es una persona con altísimo nivel de formación académica, una persona a la que le cabe el mundo en la cabeza, con la que se puede conversar sobre cualquier tema. Una persona que en el Polo ha demostrado capacidad organizativa, capacidad de trabajo, sentido de la política. Una persona que en medio de esas inmensas dificultades lo hizo tan bien administrando a Bogotá, una ciudad compleja. Ella es una luchadora de toda la vida. Clara López hubiera podido quedarse del lado de allá, en el sitio donde nació, pero decidió ponerse del lado de los débiles, del lado del verdadero progreso de Colombia.

Entonces pienso que Clara sería una excelente candidata a la Presidencia de la República. Y más importante aún, sería una excelente, la mejor presidenta de la República de Colombia. En ese sentido, es evidente que ustedes han supuesto para donde vamos. Mi idea, compañeras y compañeros, es que en este magnífico Congreso, que encarna lo mejor –simplemente hago una propuesta– debemos decidir que la candidata a la Presidencia de la República del Polo Democrático Alternativo se llama Clara López Obregón.

Luego creo que sí es verdad que este va a ser un Congreso histórico para el Polo Democrático Alternativo, sí va a ser un Congreso en el que este Partido va a dar un salto hacia adelante, un salto hacia adelante con mil dificultades y complejidades. Nunca para quienes luchan por las verdaderas transformaciones de los países han sido fáciles las cosas. Es el momento de recordar una frase de alguien a quien quise mucho y a quien le debo mucho en mi formación política, Francisco Mosquera, una frase suya que tiene que ver con el partido que tenemos que construir. Él, en algún momento de dificultades, nos dijo: “El material de los barcos y el alma de los partidos no se prueban en la calma sino en plena tempestad”. Hemos tenido tiempos de alguna complejidad y aquí está el Polo probando cuál es el alma de nuestro Partido.

Y lo que estamos definiendo es ese salto hacia arriba. Estoy convencido de que vamos a dar un salto adelante y a preparar de la mejor manera la batalla del año 2014, que libraremos todos y en la que yo jugaré el papel que me ponga esta Organización, cualquiera que sea, siempre promoviendo la unidad interna del Partido. De los que se fueron hay que aprender por ejemplo negativo. Particularmente de los jefes más vistos que se fueron hay que aprender por ejemplo negativo, en el sentido de lo que no hay que hacer.

Estaré promoviendo que el Polo siga siendo el Partido de la unidad de la izquierda democrática. Y a quienes se hayan ido, si quieren honradamente volver a ayudar a mover este barco, bienvenidos sean.

Y estaré promoviendo una gran convergencia nacional de sectores políticos y sociales de todas las vertientes que quieran acompañarnos en esta batalla por la transformación profunda de Colombia, por la paz, por la soberanía y la democracia, como se ha venido señalando hoy aquí.

Recordemos que uno de los grandes éxitos que logramos con Carlos Gaviria fue que nuestro Partido fuera más allá de las propias filas del Polo, más allá de la propia izquierda, porque no toda era gente que se sintiera militando en la izquierda. Ese propósito lo podemos lograr. Es una meta que nos debemos trazar y tenemos para lograrlo el mejor de los portaestandartes, pienso yo, que es Clara López.

Compañeros y compañeras, ustedes son la vida de este Partido. Afinemos la organización, comprometámonos a trabajar duro, vámonos en el próximo año y medio que nos queda con la idea de llevar a Clara López Obregón a cada pueblo de Colombia, a mostrarles a los colombianos de qué estamos hechos los del Polo y cuáles son nuestras propuestas. Necesitamos que cada jefe polista de todos los niveles, los compañeros dirigentes sindicales, laborales, campesinos, indígenas, se vaya hacia el movimiento social organizado, hacia los luchadores, a explicarles por qué el Polo Democrático Alternativo ha sido lo mejor que se ha construido en Colombia y por qué este es el único Partido capaz de dirigir la transformación de nuestro país.

Vámonos a librar la gran batalla con la que triunfaremos en los comicios del 2014, compañeros y compañeras.

¡Viva el Polo Democrático Alternativo!

¡Viva el Polo Democrático Alternativo!

¡Viva el Polo Democrático Alternativo!

¡Viva Clara López Obregón!