Por: Felipe Zuleta Lleras
1 Febrero 2009 - 10:00 pm
ILUSOS LOS QUE CREEN QUE EL SEÑOR Uribe no se va a presentar para un tercer período presidencial y más tontos aquellos que creen que El Mesías no está aferrado al poder como una chupa ante la eventual posibilidad de que se lo lleve la Corte Penal Internacional para juzgarlo por delitos de lesa humanidad.
Me cuenta un conocido que trabaja en la “Casa de Nari” que este asunto intranquiliza a Uribe. Y no es para menos, pues por delitos menos complicados que los falsos positivos se han llevado a otros personajes funestos de Ruanda o Yugoslavia.
Pero hay otros hechos que inquietan a Uribe; en marzo él empezará a sentir en carne propia lo que es la ingratitud. El primero en volteársele será su ministro de Defensa, señor Santos, quien no soportará dejar el Ministerio que tanta gabela le da para que después Uribe decida hacerse reelegir. El peor enemigo de Uribe será Santos y de eso no tengo la menor duda. Quienes conocen al Ministro saben que es imparable cuando se trata de convertir en realidad sus ambiciones, que por cierto son desmedidas. Por eso ya hay varias personas proponiendo que apoyemos una eventual candidatura de Santos, porque entregaría al señor Uribe a la Corte Penal Internacional el mismo día de su posesión en agosto en las horas de la noche. Yo me sumé a esa idea y estoy difundiéndola a los siete vientos, porque quien ha enunciado este postulado conoce muy bien a Santos.
Tengo entendido que el fiscal Moreno, de la CPI, anda mortificado con el señor Uribe porque éste le prometió —en su visita en septiembre— que levantaría la reserva que tiene Colombia hasta noviembre de este año para que la Corte pueda iniciar procesos criminales en el país, promesa que el señor Uribe incumplió sin calcular las consecuencias que eso tendrá para su futuro y para su propia libertad.
Este será un año muy difícil para el señor Uribe, porque tendrá que acudir a todo tipo de artimañas para poderse quedar, mientras sus propios ex colaboradores (Santos, Uribito y Noemí) van a tratar de sacarlo a como dé lugar. Ya sale de la “Casa de Nari” el primo de Pablo Escobar, primer síntoma claro de lo que le va a pasar a Uribe apenas se baje de sus blindados y no cuente con ninguna prebenda.
Al señor Uribe las cosas le saldrán mal, ya sea porque se hizo reelegir a las patadas o porque salió de la Presidencia con toda clase de barbaridades sobre sus hombros. Y pensar que se hubiera podido evitar todo esto si le hubiera dicho claramente al país que no aspira a un tercer mandato; pero por supuesto que pedirle a Uribe que sea transparente es como pedirle a una monja que se vaya a cuidar la entrada de un burdel.
Contamos las horas para ver al señor Uribe sentado en el banquillo de los acusados al lado de Thomas Lubanga, el rebelde del Congo que reclutaba a menores —como los de Soacha— para sus ejércitos asesinos.
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Notícula. Los bogotanos debemos apoyar las medidas impuestas por el Alcalde sobre el pico y placa. ¡De eso se trata, de tener autoridad en la ciudad!
· Felipe Zuleta Lleras
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