Es importante mantenerse informados, pero también necesitamos establecer límites para proteger nuestra salud mental
Rebeca Montoya
28/01/2025
La realidad nos toca constantemente con eventos que impactan nuestras fibras más profundas. Desde los sobrevivientes del Holocausto que regresan a Auschwitz 80 años después, hasta deportaciones masivas y palestinos que buscan retornar a casa en medio del conflicto. Estas historias pueden generar en nosotros un torbellino emocional. ¿Cómo podemos cuidar nuestro bienestar mientras somos testigos de estos capítulos de la humanidad? Y más importante, ¿cómo pueden proteger su bienestar emocional quienes sienten que estas noticias afectan directamente su vida?
1. Reconoce y valida tus emociones
Es natural sentir tristeza, frustración o impotencia al escuchar estas noticias. En lugar de reprimir estas emociones, permítete experimentarlas. Puedes preguntarte:
- ¿Qué estoy sintiendo en este momento?
- ¿Cómo puedo ser amable conmigo misma mientras proceso esto?
- ¿Es esto mío?
2. Evita el consumo excesivo de información
Es importante mantenerse informados, pero también necesitamos establecer límites para proteger nuestra salud mental.
- Establece horarios específicos para leer noticias.
- Opta por medios confiables que prioricen el análisis constructivo sobre el sensacionalismo.
- Busca la información relacionada contigo y con nadie más
3. Practica la compasión activa
- Al sentir el dolor de los demás, podemos canalizar esas emociones hacia acciones positivas.
- Dona a organizaciones que apoyen a las comunidades afectadas.
- Comparte información valiosa en tus redes sociales para generar conciencia.
4. Tips para quienes temen ser deportados
Si estás preocupada o asustada por la posibilidad de ser deportada, aquí tienes algunos consejos prácticos para cuidar tu bienestar emocional y tomar acciones que te empoderen:
A. Infórmate sobre tus derechos:
- Investiga tus derechos según tu situación migratoria. En muchos países, incluso las personas sin documentos tienen derechos básicos.
- Ten a la mano números de contacto de abogados o servicios legales gratuitos en caso de emergencia.
- Define un plan para tu familia en caso de que necesiten actuar rápidamente. Por ejemplo, asegúrate de que todos sepan qué hacer si alguien es detenido.
- Organiza tus documentos importantes en un lugar seguro, como identificaciones, registros médicos y cualquier otra información esencial.
- Habla con personas en las que confíes sobre tus preocupaciones. A veces, expresar lo que sientes puede aliviar parte del miedo.
- Busca organizaciones locales o grupos de apoyo para inmigrantes que ofrezcan asistencia legal y emocional.
- Practica técnicas de respiración para calmarte en momentos de ansiedad. Por ejemplo, inhala durante 4 segundos, mantén el aire 4 segundos y exhala lentamente durante 6 segundos.
- Si tienes acceso, utiliza herramientas como la meditación guiada para reducir el estrés diario.
- Aunque la incertidumbre puede ser abrumadora, enfócate en lo que sí puedes controlar, como tu actitud y tus acciones diarias.
Recuerda: no estás sola. Hay comunidades enteras luchando y apoyándose mutuamente.
5. Crea espacios de gratitud y esperanza
- Frente a la adversidad, el agradecimiento puede ser un ancla.
- Dedica un momento del día para reflexionar sobre lo que está bien en tu vida y en el mundo. No minimiza el sufrimiento, pero te ayuda a mantener el equilibrio emocional.
6. Conecta con tu propósito
Los momentos difíciles pueden motivarnos a redefinir nuestro propósito y el impacto que queremos tener en el mundo.
Reflexiona:
- ¿Con qué acciones puedo contribuir hoy a un mundo mejor?
7. Enfócate en lo que es posible hoy
Vivimos entre contrastes: dolor y esperanza, pérdida y resiliencia. Aunque no siempre podemos controlar los eventos externos, sí podemos elegir cómo responder desde un lugar de conciencia y cuidado propio.
Al cuidar de nosotros mismos, también creamos espacio para contribuir al bienestar colectivo y apoyar a quienes más lo necesitan. Tu conciencia y la capacidad que tienes de elegir lo es todo.
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