La esclavitud en el S.XXI tiene nombre: Trata de personas
Aybori Oropeza
Cuando nos preguntamos si en el S.XXI existe la esclavitud, tristemente la respuesta es: SI, vivimos en una época donde el sistema económico obliga a las personas niñas, niños, mujeres y hombres a enfrentarse a una encrucijada constante entre el tener y el ser, llevar una vida digna o dársela a otros cuesta en algunos casos desde la dignidad hasta la vida. Pero cómo este fenómeno puede parecernos ajeno, exploraremos un concepto que dibuja en esencia esta realidad, la trata de personas. En este artículo solo nos referiremos al concepto de trata, sus modalidades y añadiremos algunas cifras estadísticas de interés para el estudio de este flagelo.
La Fundación Género con Clase, editó en el año 2019 un manual[2] al cual haremos referencia como fuente de información para este artículo; qué pensamos cuando alguien se refiere a una víctima de trata, qué es lo que entendemos por trata de personas; su definición técnica es “la captación, el transporte, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación”[3].
Comenzaremos por desdibujar en partes el concepto de trata de personas, lo primero que encontramos es la población objetivo o quienes son más vulnerables ante esta situación. La Organización Internacional de las Migraciones (OIM) describe está población como hombres, mujeres, personas con discapacidad o de tercera edad, así como niños, niñas y adolescentes (NNA) en situación de vulnerabilidad o dependencia, también resalta que un factor relevante sobre estas poblaciones que agudiza el fenómeno son situaciones donde el país, en el cual habita la víctima, se encuentre ante situaciones de crisis, emergencia humanitaria, catástrofes o enfrente altos niveles de pobreza.
Otro de los aspectos de este concepto que nos llama a reflexión, es el propósito de la trata de personas, porqué apropiarse de forma hostil de seres humanos para convertirlos en fuerza de trabajo, las respuestas son las ganancias económicas incalculables que generan como esclavos, convirtiéndose esta en la principal motivación; es por ello que los tratantes no escatiman en utilizar distintos medios para iniciar el proceso de captación, actualmente nos enfrentamos a innumerables formas de interacción tales como redes sociales, medios digitales, así como los tradicionales (prensa, televisión) que ofertan de forma atractiva soluciones mágicas para ganar dinero, atraen a sus víctimas mediante ofertas engañosas, inicialmente este proceso se puede producir de forma amigable, algunas estadísticas señalan que 1/3 de las víctimas desconocen hasta llegar al lugar de recepción, que están dentro del ciclo de la trata, donde la amabilidad se transforma en acciones hostiles, uso de la fuerza u otras formas de coacción, tales como abuso de poder o uso de drogas para el control de la víctima, una vez en el sitio de acogida.
¿Qué ocurre una vez que la víctima se encuentra en medio de las redes del crimen organizado? es utilizada con distintos fines entre ellos la explotación sexual, servidumbre, matrimonio servil, mendicidad, trabajo forzado, adopción irregular hasta la extracción de órganos. Estas modalidades o mecanismo de trata de personas sólo existen ya que hay personas que deciden intercambiar dinero por servicios y se agudiza con situaciones de vulnerabilidad como las antes expuestas, ante migraciones irregulares son aprovechadas las víctimas para la explotación laboral, en algunos casos ligadas a empresas del sector agrícola, fábricas, restaurantes, sector minero, entre otros; la explotación sexual, donde se prostituye o se utiliza a la persona o al NNA para redes de pornografía infantil, pedofilia, turismo sexual, entre otros; no se escapan las prácticas esclavistas, de personal doméstico o servidumbre, los vientres en alquiler o la venta y compra de seres humanos con fines de adopción ilegal o extracción de órganos.
Y en este punto debemos preguntarnos ¿Cuáles son las consecuencias de la trata de personas? en los derechos humanos podemos afirmar que es una violación sistemática al derecho a una vida digna; en nuestras sociedades afecta el desarrollo, la democracia y la suprema felicidad social, en las seguridad ciudadana no se escapa de incrementar la violencia, las prácticas asociadas al crimen organizado, lavado de dinero, pero las más afectadas y con consecuencias permanentes son las víctimas que no sólo perjudican su salud física sino la psicológica, la cual queda impactada con cicatrices invisibles a lo largo del tiempo.
El reto al que nos enfrentamos tanto l@s ciudadan@s como las comunidades organizadas, los órganos de seguridad y el sistema de justicia de cada país, es a dilucidar cuál es la frontera entre lo lícito y lo ilícito y poder así identificar a las víctimas de este delito.
La OIM innovando a través de la tecnología con fines de investigación, realiza un esfuerzo por recopilar datos desde la perspectiva de la víctima a través de una página web global colaborativa[4], donde contabilizan a la fecha datos de 108 mil 613 casos individuales, que nos señalan que existe este flagelo en 164 países de forma probada y han sido víctimas personas de más de 175 nacionalidades.
En la región americana[5], tomaremos algunas cifras como ejemplo para caracterizar lo que ocurre, de una muestra de 7 mil 500 víctimas, el 80,3% son mujeres, 18,10% hombres; un 66% son adultos, un 33% NNA. El delito de tráfico sexual tuvo una incidencia del 67% y un 28% de esclavitud laboral, junto a un 5% de otro tipo de crimen asociado. Otro dato importante es que el 98% de las víctimas sufrieron este flagelo internamente en el continente.
En Venezuela, no escapamos de estas realidades, la situación de crisis generada por múltiples factores tales como el bloqueo económico, y las nuevas realidades asociadas a la migración hacen que este delito se configure en un problema que debe alertarnos. En una muestra del informe publicado por la OIM, sobre “Vulnerabilidad de las personas venezolanas a las prácticas de explotación, trata de personas y discriminación en Centroamérica y el Caribe” en julio del año 2019[6], donde el criterio predominante es el enfoque laboral, se encuestaron a 4 mil personas, los resultados señalan que al menos 21% de las personas encuestadas fueron víctimas de trata, un 14% indicó ser víctima de trabajo sin pago, un 2% trabajo forzado y retenidos en contra de su voluntad, un 13% trabajo por deuda, un 29% fueron víctimas de discriminación y un 55% trabajan en el sector informal. En este estudio no se realizaron preguntas relacionadas a otras modalidades de trata distintas a la laboral.
Como señalamos al principio, el sistema económico que impera en el mundo, donde prevalece la economía sobre el ser humano, convierten a este delito en uno de los más graves porque las víctimas son mucho más vulnerables, pero de los más rentables junto al tráfico de drogas y el tráfico de armas, siendo un agravante que su práctica resulta muchas veces invisible y difícil de detectar
Es trabajo de todos y todas no olvidar a las víctimas, entender que la trata de personas, es un delito que despoja a las víctimas de su humanidad, por lo que debemos estar siempre atent@s a las señales de nuestro entorno. El enemigo de este flagelo es su invisibilización, no olvides que al transformarnos en comunicadores sobre lo que esto significa colaboramos con la probabilidad de disminución de ocurrencia de este crimen.
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[1] Psicóloga, militante feminista, investigadora en el área social y de DDHH, Co-autora del “Manual ABC de trata de personas” e Integrante del equipo de la Fundación Género con Clase.
[3] Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Trasnacional (2000), y el Protocolo para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas Especialmente Mujeres y Niños que complementa esta Convención (2003) conocido como “Protocolo de Palermo”.
[6] https://reliefweb.int/sites/reliefweb.int/files/resources/07092019_dtm_venezuelans_espanol_0.pdf