VIERNES 03 DE JULIO DE 2009 00:00
Los cerca de 100 damnificados, que anoche durmieron en el albergue de Villarrestrepo, ruegan para que en esa zona no llueva más en las próximas horas, aunque muchos de ellos no podrán volver a sus casas pues una decena de inmuebles ya no se pueden habitar.
“Tenemos claro que no podemos regresar a vivir allá. En el albergue estamos un poco más tranquilos, pero de todas formas sigue el temor pues hace apenas un mes hubo una avalancha, ahora se repite la historia y en pocos meses seguramente volverá a pasar lo mismo”, dice Ingrid Lorena Patiño, quien el miércoles logró salvar sólo algunas de sus pertenencias, antes que el lodo arrasara con la mayoría de sus muebles.
Entre tanto, se agita el debate sobre la solución definitiva para garantizar la estabilidad de la cuenca.
Tanto autoridades como los habitantes de la zona coinciden en que mientras no se controlen los cultivos en zonas de ladera y la ganadería, que genera un impacto negativo en la parte alta de la cuenca del Combeima y no haya una regulación efectiva, sin duda alguna, se continuarán repitiendo gigantescas avalanchas como la del miércoles anterior o la del pasado 7 de julio, que dejó a la ciudad sin agua durante cuatro días.
Todos temen que en el futuro la furia de la naturaleza genere una tragedia de gran magnitud.
Ana Judith Pinzón, una de las damnificadas por la súbita creciente de la quebrada El Salto, responsabiliza a Cortolima por la emergencia que vivieron el miércoles.
“Hace poco compraron una finca en la parte alta de la quebrada El Salto, pero allí siguen cultivando fríjol, arveja, mora y otros productos que generan un efecto negativo en la zona, pues esto ocasiona peligrosos deslizamientos. ¿Dónde está el control de las autoridades?”, pregunta la mujer, quien también fue víctima de la avalancha que se registró hace tres años en ese mismo lugar.
Por su parte, Carmen Sofía Bonilla, directora de la Corporación Autónoma Regional, Cortolima, dijo que es urgente cambiar los sistemas de producción, especialmente en la parte alta, para de esta forma quitarle carga a la cuenca del Combeima.
“En el pasado se talaron los bosques de la zona para llevar ganado. Ahora estamos ejecutando una estrategia de gestión integral tal como lo establece el Conpes 3570 que tiene un presupuesto de 54 mil 100 millones de pesos. Ya compramos una finca de mil 150 hectáreas por un valor de 900 millones de pesos para recuperar los bosques en los que hoy tienen ganado pastando”, indicó Bonilla, al explicar las acciones que financia junto con el Ministerio del Medio Ambiente, la Alcaldía de Ibagué, la Gobernación del Tolima y el Ibal.
Por otra parte, la directora de Cortolima dijo que se hace necesario reubicar varias viviendas de la zona.
“No es fácil tomar una decisión de esta naturaleza, pero se deben reubicar varias casas para evitar una tragedia en el futuro. Aquí debe primar la vida de la gente. Ha faltado control para evitar que se construya en la zona y de eso hemos dejado constancia ante la Alcaldía de Ibagué”, explicó.
El propio alcalde de Ibagué, Jesús María Botero Gutiérrez, reconoció que la reubicación es una tarea que se debe emprender con urgencia.
“Este trabajo debe hacerse de manera conjunta con el Gobierno nacional porque se necesita una suma bastante considerable de recursos. En este caso se hace necesario recuperar esta cuenca armónicamente sin atropellar a nadie, pero entendiendo que se debe preservar la zona”, indicó.
Control integral, una necesidad
Henry Garzón, profesor de la Universidad del Tolima, quien visitó la zona en compañía del alcalde Botero dijo que las avalanchas en la zona se explican porque todas las microcuencas del Cañón del Combeima son bastante torrenciales. “Estamos en un sitio en el que confluyen microcuencas como Las Perlas, El Guamal y otras, lo que hace que con más facilidad se registren este tipo de fenómenos. Por eso, se hace urgente ejecutar proyectos de reforestación como el que actualmente se cumple para estabilizar cerca de 200 hectáreas en la parte media de la cuenca”, anota.
Garzón dice que hay que hacer un manejo integral de todas las cuencas para corregir el problema. “Además hay que convencer a los habitantes de la zona para que no invadan el cauce del río y cambiar las prácticas que afectan el ecosistema”, concluye
Maquinaria habilitó la vía
Tanto pronto se registró la avalancha, maquinaria de la Alcaldía de Ibagué y la Gobernación del Tolima se desplazó hasta el lugar para atender la emergencia, habilitar el paso de vehículos y remover el lodo de las viviendas.
Jesús Antonio Parra, secretario de Desarrollo Rural, dijo que se superaron los puntos más críticos y que se dragó la quebrada Las Perlas para superar un represamiento que había en la zona.
Entre tanto, la gobernadora encargada, Olga Lucía Alfonso, y la secretaria de Gobierno, Martha Lucía Padilla, junto con el director del Comité Regional de Atención de Desastres, Rubén Darío Gómez; estuvieron atentas en el sector coordinando el apoyo enviado por el Gobierno seccional para superar la emergencia.
Volvió el agua
El gerente del Ibal, José Alberto Girón, indicó que ayer en la tarde se restableció el bombeo de agua desde la bocatoma, luego de que maquinaria removiera gran cantidad de lodo y piedra que trajo la avalancha del miércoles pasado.
“En gran parte de la ciudad anoche volvió el líquido, luego de que nuestros funcionarios trabajaran intensamente para normalizar el servicio. En algunos barrios de la parte alta todavía hay dificultades, pero esperamos que sean superadas en las próximas horas”, anotó.
El funcionario, además, destacó las labores de dragado que durante los últimos 15 días han cumplido cuadrillas de operarios del Ibal.
“Esto permitió que lográramos superar lo más crítico de la emergencia en pocas horas”, concluyó Girón.
Acciones a seguir
Anoche, el alcalde de Ibagué, Jesús María Botero, lideró una nueva reunión del comité de emergencia ampliado para conocer los informes de cada institución, además de tomar decisiones en la inversión que se debe hacer por parte del Gobierno municipal y departamental en el Cañón del Combeima.
Tras analizar la situación, frente al documento Conpes No.3570 se establecieron las siguientes actividades:
1. Designar un comité técnico que se encargará de generar un documento en el que se prioricen las inversiones, cumpliendo con que sirvan, perduren y permitan mitigar los daños hechos por los deslizamientos.
2. La Alcaldía de Ibagué, Cortolima, la Gobernación y la Universidad del Tolima iniciarán el trabajo de identificación del plan de manejo integral de la cuenca del río para identificar las obras que se deben realizar en ella y así mitigar el impacto de la creciente.
Se sigue trabajando para normalizar el paso de vehículos por la zona y normalizar el servicio de agua en toda la ciudad. Con la claridad de que todas las actuaciones se adelantarán de acuerdo a las recomendaciones y lineamientos del documento Conpes 3570 de recuperación de la cuenca del río Combeima.
Lo perdieron todo
EL NUEVO DÍA visitó la zona y comprobó que hubo familias que perdieron prácticamente todas sus propiedades tras la fuerte avalancha.
Carlos Gutiérrez, quien vive hace 27 años en Villarrestrepo, esperaba la ayuda de la maquinaria para remover el lodo que invadió casi toda su casa.
“Nunca habíamos visto algo parecido. Esta vez la quebrada El Salto causó un daño mayor que hace tres años. En mi casa la mayoría de electrodomésticos y muebles quedaron bajo el lodo”, indica.
http://www.elnuevodia.com.co/nuevodia/ibague/notas-de-ibague/10328-sigue-la-zozobra-en-el-canon-del-combeima-.html